Los verdaderos Reyes Magos
Por Belkis Vidal.
Un 6 de enero muy diferente para los cubanos fue aquel año 1959. El pueblo festejaba en las calles, en las casas el triunfo revolucionario; el fin del oprobioso régimen del dictador Fulgencio Batista. Por primera vez el pueblo celebraba con alegría el Día de los Reyes Magos.
En efecto, ese día fue inédito para los santaclareños quienes tomaron las principales calles de la ciudad para recibir a sus verdaderos Reyes Magos. En esta ocasión los reyes no llegaron en trineos con sus tradicionales trajes rojos, ni con la bolsa de regalos. Estos fueron más reales, llegaron en vehículos, vestidos con sus empolvados uniformes verde olivos y con fusiles en ristre.
Una multitud desbordada de júbilo y alegría se concentró en la Carretera Central para ver pasar a los barbudos y al verdadero Papa Noe. Mujeres, hombres, niños y ancianos vitorearon y cantaron al paso de la Caravana de la Libertad y luego corrieron tras ella.
Por primera vez el parque Leoncio Vidal cobijó a tantas personas para ser protagonista de un hecho de tal naturaleza. El 6 de enero de 1959 alrededor del mediodía Fidel Castro se dirigió a los santaclareños. En su alocución que duró cerca de una hora el líder de los cubanos reconoció el valor del pueblo y la decisiva participación de la Villas en la última etapa insurreccional.
Con una mezcla de alegría y nostalgia los santaclareños vivieron aquel 6 de enero la inolvidable experiencia de presenciar de cerca al hombre que cumplió la promesa de ser libres o mártires.
Cincuenta y dos años después los santaclareños volverán a invadir de jubilo y alegría las principales avenidas de la cuidad para revivir la emoción de la llegada por primera vez de los verdaderos Reyes Magos de Cuba.
Un 6 de enero muy diferente para los cubanos fue aquel año 1959. El pueblo festejaba en las calles, en las casas el triunfo revolucionario; el fin del oprobioso régimen del dictador Fulgencio Batista. Por primera vez el pueblo celebraba con alegría el Día de los Reyes Magos.
En efecto, ese día fue inédito para los santaclareños quienes tomaron las principales calles de la ciudad para recibir a sus verdaderos Reyes Magos. En esta ocasión los reyes no llegaron en trineos con sus tradicionales trajes rojos, ni con la bolsa de regalos. Estos fueron más reales, llegaron en vehículos, vestidos con sus empolvados uniformes verde olivos y con fusiles en ristre.
Una multitud desbordada de júbilo y alegría se concentró en la Carretera Central para ver pasar a los barbudos y al verdadero Papa Noe. Mujeres, hombres, niños y ancianos vitorearon y cantaron al paso de la Caravana de la Libertad y luego corrieron tras ella.
Por primera vez el parque Leoncio Vidal cobijó a tantas personas para ser protagonista de un hecho de tal naturaleza. El 6 de enero de 1959 alrededor del mediodía Fidel Castro se dirigió a los santaclareños. En su alocución que duró cerca de una hora el líder de los cubanos reconoció el valor del pueblo y la decisiva participación de la Villas en la última etapa insurreccional.
Con una mezcla de alegría y nostalgia los santaclareños vivieron aquel 6 de enero la inolvidable experiencia de presenciar de cerca al hombre que cumplió la promesa de ser libres o mártires.
Cincuenta y dos años después los santaclareños volverán a invadir de jubilo y alegría las principales avenidas de la cuidad para revivir la emoción de la llegada por primera vez de los verdaderos Reyes Magos de Cuba.
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