Mi siempre querido, Caibarién .
Muchas veces me pregunto,como es posible olvidar la imagen o el recuerdo del lugar que nos vio nacer;de ese pedacito de tierra,testigo de nuestra niñez y cómplice del momento en que descubrimos nuestro primer amor .
No logro comprender como muchos coterraneos construyen una cortina de humo y olvidan la patria chica, esa que los colmó del amor de una familia y el cariño inolvidable de los mejores amigos.
Para mí,Caibarién es y será siempre el mejor de mis recuerdos.Alli siempre me espera el amor incondicional y paciente de una madre y la presencia eterna de un padre que desde otra dimensión me ayuda en cada empeño.
Amo a su gente,a su inconfundible olor a salitre,a todo su entorno y a sus encantadoras leyendas y tradiciones.
No me averguenso de expresar en mi humilde bitacora o en cualquier espacio,la añoranza por mi Villa Blanca,la tierra del emblemático,Cangrejo de Florencio Gelabert.
Por ello,desde donde quiera que esté, sentiré el orgullo infinito de ser hija de Caibarién ,de mi siempre querido Caibarién .
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